viernes, 29 de octubre de 2010

Re: Algo personal (nos sobran los motivos)

Sube. Todo, menos las tetas y el culo, sube.
Me aumentaron el jardín, la luz-el gas-el cable, la medicina prepaga. Ajustaron el alquiler, el seguro del auto, los peajes y (constantemente) el combustible.
Suben los choclos, los pepinos y las bananas. Pregunto: no nos saldrá más barato hacernos una ensalada de lechuga y consoladores de látex?
Los gustitos son lujos. Los lujos, ridículos despilfarres de bacanes.
“Todos flotan, Georgie”. Sí, esto es una película de terror. Pero si no te acordás de la película… ya ni al video club se puede ir!
Las nueve horas más el viaje, el adiós a los ticket restaurant, los premios cada día más “castigo”, los esfuerzos que se parecen al calvario… qué ganas de mandar todo a la mierda! Si no fuese porque hay responsabilidades, a Mi me vendría muy bien andar en chancletas vendiendo pachuli en plaza Francia.
Lástima que, como todo sube, el kilo de arroz integral está caro como el litro de detergente concentrado. El Magistral te debe hacer un buraco en la panza, pero rinde, eh? Qué sarcasmo pagar dos kilos de nalga y que me duela la colita de cuadril!
“Deme dos!” Pse… dos comprimidos de paracetamol, por favor, que se me parte el bocho de tanto putear.
A vos no te pasa que terminás de los pelos con tu marido, pero ya no porque cometió un gasto desmedido sino, porque se confundió y usó el efectivo disponible para pagar en el super cuando era para cubrir deudas?
A Mi me llamaron por teléfono para ofrecerme la misma previa de la mesa larga y la palmada vaselínica en el hombro. Preferí el golpe seco por interno. Así al menos pude esbozar un “fuck you” al aire y soñar con que alguna vez nos vamos a ir de acá, mostrando el culo, por la puerta grande.
Yo ya sabía que el aumento era más mentiroso que Pedrito y RRHH más irreal que el Lobo. Por eso preferí que me lo dijeran por teléfono. Así cuando me quisieron alentar ofreciendo más responsabilidades, me toqué una teta. Minga!
Y me acordé. Todo sube. Inclusive las tetas, querida.
Si hoy tuviese que pagar estos implantes, me alcanzaría únicamente para el pomo de fastix.

Algo personal

Te cuento algo? Recién vuelvo de una reunión con la gente de Control de Gestión en la cual se pretendía verificar la forma de contabilización de los ingresos a través de una nueva interfaz de Sistemas. Anecdótico. El punto es que en un momento me preguntan: “y vos qué hacés con los ingresos”… y no pude evitar mirarme el bolsillo.

Ingresos? Ella tiene egresos, no ingresos. Cuando llegan los ingresos ya fueron superados por los gastos a cuenta. Gastos a cuenta de los zapatos de Charkany? De las carteras de Prüstte? De la ropita de Wantama? Nooooo!!!! Del super pagado con la tarjeta porque sino no se llega a fin de mes, de la matrícula del colegio de los hijos para el año que viene financiada en cuotas, de las expensas en las que la mitad del edificio no paga pero al encargado hay que pagarle igual… Y hablando del encargado… Cómo hace para que le suban el sueldo? Cómo es que su sueldo se ajusta y el de Ella no? Cómo es que cuando le pido a mi jefe hablar de mi sueldo siempre obtengo el “es un tema de Recursos Humanos”, “los jefes no manejamos los sueldos”… Evidentemente “De eso no se habla”.

De lo que sí se habla es de la REESTRUCTURACION, viste? Revuelven el organigrama y te cambian de área, o le cambian el nombre a tu puesto, o vuelan una gerencia y te mudan de piso y vos te llevás tu trabajo, seguís haciendo LO-MIS-MO-CON-O-TRO-JE-FE-EN-O-TRO-PI-SO. Eso es genial, seguramente alguien con eso justifica su función cambiando para que nada cambie. Así que prestá atención al movimiento por las dudas que te toque. No todos los movimientos son agradables, eh?

Para movimiento agradable está el del sueldo. La expectativa de movimiento. Mínimo que te lo muevan por inflación. Aunque sea por el índice del INDEC, por lo menos. Y te llaman a una sala de reunión, grande, con muchos sillones y una mesa laaaaaaaaaaaaaaaaarga, así te sentís importante y te lo anuncian. Tu jefe te llama y con cara de “lo único que tengo es un ancho falso”, te dice que te va a informar el incremento que resulta ser casi tan representativo como lo es el vainillín a un bizcochuelo. Cuando querés hacer uso de tu derecho a réplica resulta que te salen con el “no, mirá, yo sólo te lo comunico porque esta decisión no la tomé yo… los jefes proponemos y en otro lado ajustan”. Parece sacado de una tira de Dilbert. A dónde queda “el otro lado”? Es el lado oscuro? Es el lado de la fuerza? Evidentemente es el lado opuesto. Opuesto por el vértice, y el vértice es Ella, de un lado las cuentas que suben y del otro el sueldo que saluda en la boca impertérrita de alguien que debe vivir una realidad virtual o no importarle un bledo de lo que le pasa al que tiene enfrente. Eso sí, en la misma reunión aprovecha para decirte que como sos TAN eficiente y responsable y siempre cumplís con tus objetivos, tiene un trabajito adicional para darte.

Suerte que es mi jefe y no es mi amigo. Entre esos tipos y yo hay algo personal.