viernes, 14 de enero de 2011

TELO digo

Vamos a un lugar más cómodo?
La primera vez que me sugirieron eso pensé: por favor, si esto indica que vamos a concretar, ya! Pero en ese momento, inexperta en Turismo, Gastronomía & Hotelería Sexual, me fue imposible adivinar lo que venía. No, lejos de estar refiriéndome a la performance de mi compañero, hablo concretamente del mundo por descubrir que me representó el albergue transitorio desde el vamos. Ya, desde la vereda, las lucecitas rojas y la placa de bronce, el arbustito, la cabina de la recepción blindada y la lista de precios me atraparon, maaaaaal. Peor que lo que les pasó a nuestros maridos con Lost!
Es que a esos lugares entrás acarreando una calentura de nivel medio a importante que se convierte en nula cuando empiezan a preguntarte si querés que tenga ducha escocesa, sillón del amor o sea temática.
Escocesa? Tiene relleno de dulce de leche y viene bañada en chocolate?
Temática? Estará el sapo Pepe?
Sillón del… no, dejá. Esto ni te lo explico o nos levantan el blog.
Hasta ahí yo me pongo nerviosa y miro para el costado. A Mi pocas cosas me dan vergüenza, pero ver la cara del tipo que le pregunta al otro tipo que de pronto se da vuelta y te mira, buscando aprobación para ver si lo vas a dejar sentarte sobre ese puff. No, too much!
Ya me voy relajando en el ascensor. Ahí seguro te toca viajar con alguna otra pareja, a menos que vayas a las tres de la tarde (si no estás por el microcentro, claro). Es imposible poner cara de boludo… o no venimos todos a lo mismo!? Ah, claro! Quizás ellos estén de trampa, no? Mmmm… labura el morbo en el ascensor, eh?
Así, cuando te bajás, buscás tú habitación y al entrar una voz en off te da la bienvenida y te recuerda que te quedan 120 minutos para amar todo lo que puedas, o pagar excedente.
A Mi me atrapa la computadora a bordo y pierdo, al menos, 20 minutos configurando el juego de luces (donde seguro dos están quemadas) y la música. No es demasiado extremista que haya sólo TRES CANALES de audio donde A) es románticos latinos, B) consultorio odontológico y C) hard rock? Generalmente termino cogiendo al ritmo de Rock n’ Roll All Night! Es, claramente, mejor que No sé tu...
A la hora del entretiempo, nada mejor que llenar el jacuzzi. Y después darte cuenta que el shampoo va antes porque “revolver” 5.000 lts de agua con el pie para hacer espuma es IMMMPOSIBLE. Nada, o pedís otro sobrecito (los tienen contados??) y arrancás de cero o te concentras y “a lo tuyo!”.
Volvemos a la cama? Ojo porque esto no está bien pensado. Salir mojado de ahí y caminar sobre las cerámicas enceradas puede ser mortal. Y, con suerte, terminás de culo en la alfombra. Adiós erotismo. Los espejos por todos lados brindan la visión completa de tu celulitis rebotando contra el piso.
Y, mientras sube nuevamente la temperatura al ritmo del “juego del doctor”, la misma puta voz en off que te recuerda que te quedan cinco minutos. Un rapidín y a salir con el pelo revuelto. Revuelto y mojado… que el dicho es conocido: más inútil que secador de pelo de telo!
Sí, ir al telo es como salir de excursión. No tenés a los pibes por el medio, no tenés que hacer la cama ni juntar las toallas del piso (ah, no?) y te traés de souvenir los peines y cepillos de dientes…

1 comentario:

  1. ajajajajajaja, hace mucho que no voy a un telo, pero mis recuerdos son tal cula!!!!!

    ResponderEliminar